Hola chic@s! Pues ya se acabó la Feria de Abril. ¡Por fin!..jeje porque llega a durar un poco más y muero en el intento...jeje No os creáis que soy una ferianta empedernida, pero a lo tonto a lo tonto hemos ido tres días y como os conté en la anterior entrada cargada con miles de cosas para las niñas, pasando muchoooo tiempo en los cacharritos y volviendo a casa más tarde de lo habitual.. y yo que no estoy para muchos trotes ya, estoy muuuy cansada. Ahora toca volver a la rutina y ¡cómo cuesta!, aunque yo la agradezco, la verdad. Otra cosa que tengo pendiente es terminar de hacer el cambio de armarios. Aunque yo soy de las que no se quitan el sayo hasta el 40 de mayo, sí es cierto que ya el abrigo no nos lo vamos a poner más hasta el próximo invierno.¡Menudo follón tengo! Porque no es lo mismo cambiar armarios para uno que para cuatro y más teniendo que comprobar qué ropa del año pasado es aprovechable y cúal no. Lo que sí es cierto es que hay que ir pensando en los modelitos para el verano, porque aquí la primavera dura un suspiro, y aunque vendrán días más frescos, en dos o tres semana ya tenemos instalados los 35º.
En fin, que en medio de este panorama de vuelta a la normalidad, tengo varios proyectos costuriles encima de la mesa a los que quiero dar un buen adelanto esta semana: terminar el vestido del cose conmigo (¡Sonia, soy la última, lo siento!), un par de vestidos reciclados, la labor del once proyectos y un par de vestidos que están a falta de últimos retoques. Por eso, y con vuestro permiso, me voy a tomar unos días de descanso del blog para poner en orden mi casa e instalar cómodamente a la señora rutina. No serán muchos días.. para mí esto se ha convertido casi en una necesidad..jaja, pero necesito un tiempecito para desconectar y volver con más fuerza si cabe..
Pero antes de deciros hasta luego os dejo unas fotos de esta servidora vestida de flamenca. No son una maravilla, pero espero que os gusten.
Un besote y hasta luego